Fundada en 1980, Bodega Amparo nació como un comercio familiar, en pleno barrio de Palermo, Buenos Aires. Hoy, sus administradores son los hermanos Maldonado, fieles a un legado iniciado por su abuelo Juan y que recibirán de manos de sus padres, Amparo y Juan Maldonado. Desde el principio, la idea es abrir día a día las puertas de un comercio de productos exclusivos, como el aceite de oliva extra virgen, aceitunas sanjuaninas, variedad de vinos y especias.
El pasar de las décadas afianzó a la marca entre el público y, motivados por un espíritu de crecimiento, Bodega Amparo emprendió un camino de evolución, llegando a otras áreas de la ciudad con la apertura de dos nuevos locales, en Villa Urquiza y Villa Devoto. Aggiornándose, para acompañar a un mercado en constante transformación, renovó su imagen y estableció su presencia en medios digitales, para alcanzar a un público cada vez más diverso.
A la gran variedad de productos premium y exclusivos que ofrece, los cuales el público elige día a día por su calidad, se suma la atención personalizada. Consejos, sugerencias y conocimientos de los productos son parte del valor agregado de la Bodega, y que hacen única a cada experiencia de compra.
La constante capacitación del personal, la actualización de las infraestructuras y la búsqueda permanente de nuevos productos se suman a dichos valores, para ofrecer una propuesta siempre renovada.
Desde sus vinos y quesos, hasta su famoso aceite de oliva y aceitunas, todos los productos poseen un signo de calidad propio. Son elegidos en base al conocimiento del mercado y del paladar de sus clientes. Una fórmula que ha perdurado década tras década y que hoy continúa siendo exitosa.